(8) Vivo gracias a un pequeño sueño, que me coronó como su dueño (8)

miércoles, 10 de agosto de 2011

De lo que aconteció a un hombre bueno con su hijo

     Trata esta historia, de un padre, su hijo y su burro, regresaban de la dehesa, de alimentar al ganado… el padre iba sentado a lomos del burro, mientras el hijo los acompañaba a pie. Al pasar estos por el primer pueblo, escucharon cómo una señora le decía a otra…“Mira esos dos; el padre a lomos del burro mientras el pobre niño tiene que ir caminando… ¡¡¡vergüenza tendría que darle!!! ¡Vaya padre!” Al escuchar el comentario, decidieron, antes de atravesar el siguiente pueblo, cambiar sus puestos; Así que esta vez, el niño iría sobre el burro y el padre lo haría a pie junto a ellos…Y así emprendieron la marcha…
     No habían alcanzado el segundo pueblo, cuando en su camino se cruzan con un peregrino, que al verlos no puede evitar comentar la estampa. “Lo que hay que ver, que triste que un niño tan joven haga caminar a su anciano padre mientras él disfruta de las vistas a lomos del burro.” El padre escucha el comentario del peregrino, y decide, así las cosas, sentarse junto a su hijo a lomos del burro” Y  prosiguen su camino…
A punto estaban de cruzar el pueblo, cuando se encuentran a puertas de este a un cura; este les hace detenerse y les pregunta con un tono acusatorio… “¿No les da vergüenza?, ¡pobre animal!, hay que ser vago y cruel para hacer algo así… Ahí, bien cómodos sentados mientras el burro no puede con su alma.” El padre y el hijo, ante la acusación del cura, se apresuran a bajar del animal y continúan el camino los dos a pie junto al burro, y así entran en el pueblo…
     Una vez a la altura de la plaza Mayor se percatan de que un grupo de personas les señalan mientras se ríen, y cuál es su sorpresa cuando descubren que el motivo de las carcajadas son ellos.”¡¡¡Mirad a esos dos!!! No se puede ser más tonto, pues van los dos caminando teniendo a un burro… Y el burro tan campante”
      ¿La moraleja? Mejor hacer en esta vida lo que uno crea correcto, porque si escuchamos a los demás e intentamos agradar a todo el mundo… puede que un día acabemos, sin darnos cuenta, con el burro a cuestas…
"No camines delante mío, puede que no te siga. 
 No camines detrás de mí, puede que no te guie. 
 Camina a mi lado y sé mi amigo..."

La apariencia puede seducir, la personalidad puede ENAMORAR.

El amor Perfecto no llega...

... Se CONTRUYE :)